Fuentes oficiales de Urbanismo explicaron que el ayuntamiento gasta anualmente "unos 50 millones de euros" en la conservación, consumos energéticos y mantenimiento. Pero que este plan se realiza para adaptarse a la legislación estatal sobre rehabilitación, regeneración y renovación urbana. Así que estos equipamientos, hasta ahora exentos de las denominadas inspecciones técnicas de edificios (ITE) que son obligatorias para edificaciones privadas cuando superan los 50 años de antigüedad, también lo será para los inmuebles que forman parte del patrimonio municipal.
En el listado que se maneja figuran 193 centros educativos, de los que en este 2015 se visitarán 20, entre ellos el colegio Gascón y Marín, Luis Vives, Joaquín Costa, San Braulio o Julián Sanz Ibáñez, entre otros. También se incluyen 90 deportivos, y nueve de ellos pasarán este año por este examen. Los de Gran Vía, La Jota, Salduba o Movera, entre ellos. Y de los llamados de uso general, serán 22 de 214 que aparecen en la relación de equipamientos a analizar. Diversas zonas del cementerio de Torrero, la alcaldía de barrio de Alfocea y Villarrapa o el Centro Operativo de Vialidad y Aguas estarán entre los primeros en ser analizados en este ejercicio.
Pero lo más llamativo es que también se inspeccionarán los que se encuentran en desuso. Junto a los cementerios rurales suman 50 y este año se analizarán 6: el Palacio de Fuenclara, el cuartel de San Agustín, la Casa Palafox, el edificio del número 8 de la calle Madre Ráfols, la Celda del Prior y la Portería de La Cartuja Baja.
Otros 191 inmuebles están cedidos y estarán exentos de esta revisión técnica. Algunos como el Auditorio, el pabellón Príncipe Felipe, el Mercado Central o el de San Vicente de Paúl o los edificios de la Expo están entre ellos.
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